Variedad de hongo muy buen comestible característica por su sombrero anaranjado, sus poros blancos y su pie largo y ventrudo con gruesas granulaciones marrones que grisean al frotamiento, lo mismo que la carne al corte. De un sabor similar a los boletus, aunque de peor calidad.
Seta poco conocida, pero un gran comestible, de tamaño medio-grande. Se caracteriza por su sombrero rosado y seco, con bordes plisados, sus láminas arcillosas y su pie provisto de un anillo muy regular y con superficie estriada.
Los hongos royos son muy fáciles de reconocer por su aspecto y especialmente por el látex color zanahoria que exudan sus heridas, lo que las convierte en hongos muy seguros, ideales para los recolectores sin experiencia.
El gorringo u oronja es considerada por algunos expertos como la reina de las setas, muy buen comestible aunque se deteriora con rapidez. Se caracteriza por su sombrero rojo anaranjado, su amplia volva membranosa, su anillo membranoso en el pie y sus láminas y pie amarillos.
Dentro de este grupo de especies destacamos Russula cyanoxantha, Russula virescens, Russula vesca y Russula heterophylla. Son especies muy próximas entre sí. Se trata de hongos micorrícicos asociados a edades adultas del arbolado.
Seta fácil de reconocer por la época en la que crece: después de las primeras nevadas de febrero. Suele pasar desapercibida al tener colores grisáceos y estar a menudo enterrada entre la hojarasca.
Crece en otoño en los claros de los bosques de hoja caduca y coníferas, formando los denominados ‘corros de brujas’, cambiando el color de la hierba que está en sus proximidades.
De aspecto atrompetado. Su nombre vulgar proviene del francés y alude a su época de aparición que suele coincidir con la festividad de Todos los Santos, el 1 de noviembre. A pesar de su aspecto y nombres populares se trata de una seta buen comestible y fácil de conservar por desecación.
La Pardilla o Ilarraka es una seta que crece en setales. Al igual que su olor, su sabor es característico y particular de la especie. Por otro lado, hay que tener cuidado porque es un poco indigesta y además posee una sustancia que provoca trastornos digestivos a algunos comensales, que son sensibles a ella.
Seta de carne delgada y flexible con olor muy agradable. Al igual que su pariente cercano, Cantharellus Cibarius, los gusanos no atacan nunca a esta especie.