Los hongos royos son muy fáciles de reconocer por su aspecto y especialmente por el látex color zanahoria que exudan sus heridas, lo que las convierte en hongos muy seguros, ideales para los recolectores sin experiencia.
Seta fácil de reconocer por la época en la que crece: después de las primeras nevadas de febrero. Suele pasar desapercibida al tener colores grisáceos y estar a menudo enterrada entre la hojarasca.
Crece en otoño en los claros de los bosques de hoja caduca y coníferas, formando los denominados ‘corros de brujas’, cambiando el color de la hierba que está en sus proximidades.
De aspecto atrompetado. Su nombre vulgar proviene del francés y alude a su época de aparición que suele coincidir con la festividad de Todos los Santos, el 1 de noviembre. A pesar de su aspecto y nombres populares se trata de una seta buen comestible y fácil de conservar por desecación.
Estos hongos carnosos y de característico himenio tubular se encuentran en abundancia en los montes de Aezkoa, produciendo rentas elevadas en hayedos y robledales aclarados.
Hay cuatro especies:
• Boletus aestivalis.
• Boletus aereus.
• Boletus edulis.
• Boletus pinophilus.